Gases refrigerantes ecológicamente seleccionados reducen el 99% la emisión directa de gases de efecto invernadero.
La mayoría de las soluciones propuestas para el calentamiento global pasa por el desarrollo de tecnologías alternativas y sustentables.
En el segmento de refrigeración, se recomiendan tres gases para la fabricación de equipos, por su bajo impacto en la atmósfera: R600a (más adecuado a la refrigeración residencial), R290 y R744. Los dos últimos ya están presentes en los productos con la tecnología Metalfrio Next.
Metalfrio Next: en línea con el Protocolo de Kyoto
Hasta el inicio de la década del 90, los refrigeradores utilizaban como gases refrigerantes los CFCs (clorofluorocarbonos), perjudiciales a la capa de ozono. En 1987, el Protocolo de Montreal recomendó la sustitución de esos gases por los HFCs (hidrofluorcarburos). En esa época, Metalfrio fue pionera en la adopción de esta propuesta en América Latina.
El 2005 entró en vigor el Protocolo de Kyoto, en que 175 países – incluyendo Brasil y la Unión Europea – se comprometieron a adoptar rígidas medidas para reducir la emisión de gases causantes del efecto invernadero (GEE), entre los cuales estaban los HFCs, actualmente utilizados por la industria de refrigeración. Aunque no perjudiquen la capa de ozono, los HFCs presentan un potencial de calentamiento global cientos o miles de veces superior al dióxido de carbono (CO2).
Manteniendo su liderazgo y reforzando su compromiso con el medio ambiente, la tecnología Metalfrio Next, adopta los gases ecológicamente seleccionados R290 y R744, que presentan menor potencial de calentamiento global, significando una reducción del 99% en las emisiones directas de gases de efecto invernadero en la atmósfera.